Equilibrio entre el trabajo y la vida privada: Un enfoque de cinco pasos para conseguirlo a tu manera
Gary McClain, PhD, es un miembro de la facultad de la Escuela de Ciencias de la Salud y terapeuta especializado en ayudar a los clientes a lidiar con el impacto emocional de las enfermedades crónicas y potencialmente mortales.
El término "equilibrio entre trabajo y vida" se utiliza mucho. Yo mismo lo uso mucho cuando hablo de mi propia vida y con mis clientes.
De vez en cuando hago un taller sobre este tema para empresas locales. Los empleados vienen durante su hora de almuerzo y les hablo de la importancia de tener un equilibrio en sus vidas. Pero a menudo me pregunto si les estoy aportando algo realmente valioso. Me cuentan que la mayoría de los días no tienen tiempo para hacer nada más que comer un sándwich en sus escritorios. Algunos trabajan hasta bien entrada la tarde, otros salen corriendo del trabajo para recoger a los niños, que luego van a necesitar cena y ayuda con los deberes, o ser transportados al entrenamiento de la liga infantil o a las clases de baile.
Me pregunto: ¿Qué puedo decirles sobre cómo lograr el equilibrio entre el trabajo y la vida privada cuando tienen tantas exigencias de tiempo?
Inclinar la balanza
El problema del equilibrio entre trabajo y vida personal como término es la palabra "equilibrio". Evoca la imagen de una balanza, en perfecto equilibrio, con un objeto en cada lado de la balanza. Es demasiado fácil asumir que el objeto de un lado debe representar el trabajo, y que el objeto del otro lado de la balanza representa lo contrario del trabajo, como la relajación o la diversión. (Por cierto, "trabajo" no tiene por qué significar empleo. Las responsabilidades en casa también consumen tu tiempo y pertenecen al lado del trabajo de la balanza).
Para la mayoría de nosotros, ese tipo de equilibrio es imposible. Y quizá ni siquiera sea deseable. En consecuencia, cualquier posibilidad de equilibrio entre el trabajo y la vida privada se descarta fácilmente.
Pero creo que cuando descartamos el equilibrio entre el trabajo y la vida privada, ignoramos el mensaje. Y es un mensaje sencillo: en medio de tu agitada vida, tómate un tiempo para ti mismo para recargar las pilas.