Efecto bipolar de la actuación policial

Las investigaciones demuestran que, mientras trabajan, los agentes de la ley experimentan fisiológicamente un "efecto bipolar". Mientras están de turno, sus cuerpos están en "modo de lucha o huida", similar a un estado maníaco. Sin embargo, cuando salen de su turno, se "deprimen", lo que se asemeja al estado de depresión del bipolarismo. El resultado esperado de este efecto bipolar es una mayor tasa de divorcios, suicidios y alcoholismo.

Las investigaciones sugieren que los agentes de policía de las grandes jurisdicciones sufren más consecuencias psicológicas y sociológicas que los agentes de policía de las jurisdicciones más pequeñas. Por otra parte, los agentes con tiempos de desplazamiento más largos experimentan menos tensiones psicológicas y sociológicas que los agentes de policía con desplazamientos más cortos hacia y desde el departamento.

Este estudio se llevó a cabo porque hay pocos datos empíricos, si es que hay alguno, sobre las correlaciones entre los factores de estrés en el trabajo y las consecuencias psicológicas y sociales para los agentes de la ley. Me interesaba la respuesta fisiológica de los agentes de la ley dentro y fuera del trabajo, así como la alta tasa de alcoholismo, divorcio y suicidio entre los agentes de la ley.

Como antecedente, la adicción entre las fuerzas del orden es un 20-25 por ciento más alta que la media nacional (Riley, 2012). Es más probable que el suicidio ocurra entre los 7 y 14 años en el trabajo (Riley, 2012). El abuso de sustancias generalmente se manifiesta después de 10 años en el trabajo, generalmente debido a un evento traumático que es tratado con drogas, o una lesión tratada con drogas (Riley, 2012). Otros factores citados que contribuyen son la estructura de mando y el aislamiento. Es importante señalar que los agentes de policía que participan activamente en la vigilancia comunitaria experimentan menos aislamiento.

Se realizó una encuesta en la que se preguntaba a los encuestados sobre el sexo, el tamaño del departamento, el turno, los años en el cuerpo, el tiempo de desplazamiento, el nivel de actividad delictiva en su jurisdicción, el uso de la fuerza, la muerte de la pareja, el estado civil, el consumo de alcohol y los pensamientos suicidas. El estudio incluyó 98 sujetos, 87 de los cuales eran hombres. Por lo tanto, la variable de género se eliminó del análisis. Todos los sujetos pertenecían a departamentos de policía de Ohio. La mayoría de los sujetos tenían entre 24 y 48 años de edad y contaban con cierta formación universitaria. El jefe de policía distribuyó la encuesta a los agentes a través de un enlace a un encuestador en línea.

Los resultados del estudio fueron interesantes:

Divorcio  

  • El 26% se casó una vez
  • El 48% se casó dos veces
  • 8% se casó tres veces
  • 15% Nunca se ha casado
  • 3% No responde

Pensamientos suicidas

  • 67% sí
  • 30% no
  • 3% No responde

Alcoholismo

  • 59% De 1 a 3 bebidas al día
  • 9% 4-7 bebidas al día
  • 3% 8 o más bebidas al día
  • El 8% bebe ocasionalmente
  • El 15% no bebe nunca
  • 6% No responde

Correlaciones importantes en los datos: Del 71 por ciento de los agentes que admitieron beber a diario, el 69 por ciento pertenecía a grandes jurisdicciones y el 66 por ciento había estado involucrado en tiroteos. Del 67 por ciento de los agentes que admitieron tener pensamientos suicidas, el 80 por ciento pertenecía a jurisdicciones grandes y el 92 por ciento había estado involucrado en tiroteos. Por último, la tasa de divorcio era casi la misma en las jurisdicciones grandes y en las pequeñas; el 51 por ciento de los de las jurisdicciones grandes se había casado dos veces, y el 49 por ciento de los de las jurisdicciones pequeñas se había casado dos veces.

Es necesario realizar más investigaciones como ésta para comprender mejor los factores desencadenantes. Además, es necesario identificar a las mujeres e investigarlas en un estudio duplicado, ya que sospecho que los resultados pueden ser diferentes. El tamaño de la jurisdicción y el número de años en el cuerpo influyeron en si el sujeto se había divorciado, consumía más alcohol y tenía pensamientos suicidas. El tiempo de desplazamiento no tuvo un resultado estadísticamente significativo, ya que el 93% de los encuestados tenía un tiempo de desplazamiento inferior a 15 minutos. Además, el turno no tuvo un impacto estadísticamente significativo en ninguna de las variables, probablemente porque los turnos cambian a lo largo de la carrera.

La investigación tuvo algunas limitaciones notables. El mayor número de respuestas de los encuestados de las jurisdicciones más grandes y de los veteranos podría sesgar los resultados. Se necesita una muestra mayor para obtener resultados más fiables. Además, el enlace de la encuesta fue difundido por los jefes de policía de las jurisdicciones seleccionadas. Se cree que los agentes temían que los resultados pudieran ser atribuidos a ellos.

En conclusión, es necesario investigar más para comprender mejor las correlaciones. Hay demasiadas variables que intervienen para decir cuáles son estadísticamente significativas. Por ejemplo, no es sorprendente que un veterano de 25 años en el cuerpo haya tenido más matrimonios que el novato de 24 años, o que el mismo veterano tenga pensamientos suicidas que el nuevo novato no ha tenido. Cuanto más conscientes sean los agentes de la ley y sus familias de este efecto, mejor podrán reconocer y ajustar su comportamiento.